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Iniciamos nuestra misión en la localidad de Ton-
dikoirey donde trabajamos con un grupo de 30
mujeres organizadas bajo el lema “moriban”
que significa “fin de la pobreza” en la lengua
local djerma. Un grupo de mujeres emprende-
doras que desarrollan actividades de generación
de ingresos, con nuestro apoyo y de diferentes
ayuntamientos de Navarra
mediante cursos de
alfabetización funcional y una dotación de gana-
do, para mejorar las condiciones de vida de sus
familias y, como una de ellas compartió, “
quiero
que mis hijos tengan oportunidades y no las ten-
drán si no podemos hacer frente a los gastos de
su educación
”. Sentadas a la sombra de un árbol
y con orgullo nos han hablado de todo lo que
han aprendido y mostrado sus corderos ya a
punto de ser vendidos en la cercana fiesta del
Eid Al Adha.
Cerca de Niamey se encuentra la localidad de
Doguel Kaina, donde nos esperaban los dos gru-
pos de promoción femenina de la localidad; más
mujeres catalizadoras del desarrollo de sus fa-
milias. Con el apoyo del
Ayuntamiento de Pam-
plona
hemos mejorado sus capacidades trans-
formando productos agrícolas como son la ela-
boración de cuscús a partir de arroz o mijo y
recibiendo cursos de alfabetización. La profeso-
ra es una mujer del grupo y sus experiencias nos
muestran como unos de los pilares del desarro-
llo son las propias comunidades: “
estoy tan or-
gullosa de mis compañeras, se han esforzado y
aunque tuvieran muchas obligaciones familia-
res, no faltaron un solo día del curso
”. Nuestra
visita continúa por una pista de tierra hasta las
instalaciones de la cooperativa de agricultores
de Doguel Kaina formada por 590 miembros
que con los pocos medios de los que disponen
consiguen cultivar arroz en una zona de 126
hectáreas con dos cosechas anuales. Esta locali-
dad nos muestra como la riqueza de un territo-
rio depende en gran medida de su capacidad
para conservar y manejar sus recursos natura-
les. El técnico agrónomo de DIKO, Zakari Tcham-
bou, nos explica como con pequeños gestos han
conseguido aumentar la producción de arroz en
un 11,87 %. Además, tres miembros de la
cooperativa prepararon tres parcelas experi-
mentales de agricultura ecológica bajo la super-
visión del Instituto de innovación agrícola de
Níger, el INRAN. Con la financiación del
Go-
bierno de Navarra
se ha desarrollado este ciclo
de formaciones agrícolas, la experimentación
con técnicas agroecológicas en la producción de
la variedad de arroz local paddy y la dotación de
materiales e insumos agrícolas.
Una misión breve que nos ha mostrado cómo la
relación con DIKO y las comunidades donde tra-
bajamos es sólida y consolidada que se basa en
la confianza compartiendo los mismos ideales y
con proyectos de desarrollo rural con los que
facilitamos procesos de empoderamiento a ni-
vel comunitario. Pero aún nos quedan muchos
retos para el próximo año 2018, entre otros,
nuestro programa de asistencia humanitaria en
la región de Diffa que iniciamos el próximo mes
de octubre con el apoyo del
Fons Mallorquí y
del Gobierno de las Islas Baleares
. Según las
autoridades locales, en julio del 2017 había más
de 248.000 de personas refugiadas y desplaza-
das
i
nternas en Diffa viviendo en condiciones
precarias y muy expuestas a la violencia y las
enfermedades, y con una respuesta de emer-
gencia de la comunidad internacional insuficien-
te hasta ahora para satisfacer sus necesidades
básicas. Para Diko y ACPP, la situación en Níger,
no es otra de las crisis olvidadas, la tenemos
muy presente porque hemos aprendido que la
solidaridad no entiende de fronteras. ●
¿Conocen algo de Níger? Este extenso país del
Sahel se encuentra rodeado por varios países
como Argelia, Libia, Chad, Nigeria, Benín, Burki-
na Faso y Mali constituyendo un cruce de cami-
nos histórico para las poblaciones de África Oc-
cidental hacia el desierto. Actualmente, los con-
flictos y las situaciones de inseguridad que se
viven en estos países limítrofes están afectando
directamente a la población nigerina. Por un
lado, se sienten obligadas a desplazarse a zonas
más seguras afectadas por ataques del grupo
terrorista Boko Haram (como la región de Diffa)
y por otro lado, acogiendo con los pocos recur-
sos disponibles a personas refugiadas que hu-
yen de los conflictos en Mali, Chad y Nigeria.
Pese a la inseguridad, Níger, que obtuvo el pe-
núltimo puesto del Índice de desarrollo humano
del 2016, está haciendo frente a la situación con
su carácter de sociedad acogedora y solidaria.
Ante esta situación, ACPP ha mantenido y refor-
zado el trabajo iniciado en el 2010 con la organi-
zación nigerina DIKO, que significa “apoyo” en la
lengua local djerma, fortaleciendo las capacida-
des de la sociedad civil organizada y la defensa
de los derechos humanos.
El pasado mes de agosto realizamos una misión
de nueve días en la capital, Niamey, y la región
de Tillaberi, donde desarrollamos la mayoría de
nuestras intervenciones. Un mes de agosto que
se caracteriza por las fuertes lluvias que origi-
nan un paisaje verde que nada tiene que ver
con la imagen de un país saheliano.
Un momento de la reunión mantenida con el grupo de promoción femenina de Doguel Kaina.
Níger, donde se cruzan los caminos
Gemma Griera // Equipo ACPP África Occidental
Agricultor de la cooperativa de Doguel Kaina en una de las
parcelas experimentales