La localización, una apuesta de éxito en la alianza de DIKO y ACPP en Níger
Issoufou Soumana // Presidente de la ONG DIKO
El apoyo a la sociedad civil, democrática y progresista en otros países siempre ha sido una de las principales características de la forma de trabajar de ACPP, ya sea en el ámbito de la cooperación al desarrollo o en la acción humanitaria. En este último campo, si bien ha habido un mayor reconocimiento de la importancia del papel de los actores locales en los últimos años, esto no ha sido sin cierta lucha para dejar en evidencia y deconstruir las dinámicas de poder que existen en el sector humanitario, y que han actuado durante décadas para imponer el rol de los actores internacionales y marginar y socavar las voces de los locales.
La localización es uno de los pilares de la forma de trabajar de ACPP en la acción humanitaria, reconociendo que los actores locales y nacionales desempeñan un papel esencial en la respuesta a las crisis. Para nosotras, la localización es mucho más que una cuestión del reparto de fondos humanitarios, sino que implica una profunda transformación de las dinámicas del sector humanitario para poner no solo los recursos, sino también el poder de toma de decisiones en manos de los actores locales.
Os presentamos aquí el artículo que sobre la localización, ha escrito el presidente de DIKO nuestra socia local en Níger.
Desde 2017, el concepto de localización de la ayuda ocupa un lugar creciente en el debate sobre la cooperación internacional. La “localización de la ayuda humanitaria” es un proceso colectivo de los diferentes actores que conforman el sistema humanitario y que tiene como objetivo situar a los agentes locales en el centro de la acción. Se inscribe en una reflexión más global sobre la transformación de los modelos de financiacion y en la voluntad de pensar y de llevar a cabo las iniciativas a partir de los actores y actrices «más próximos al terreno“. Es decir, una ayuda “más cercana“, una ayuda “sin intermediarios“.
Se trata, sin embargo, de conceptos que están más cerca de la teoría que de la práctica. ¿Qué está ocurriendo realmente con la localización sobre el terreno? ¿Cuál es el discurso y la práctica de los diferentes agentes implicados? Aunque muchos actores internacionales son conscientes de la importancia de la localización, especialmente en contextos de seguridad críticos y volátiles, son menos los que avanzan realmente hacia una localización efectiva en línea con los compromisos del Grand Bergain.
En 2021 los actores humanitarios en Níger, especialmente las ONG internacionales, se han enfrentado a crecientes restricciones de acceso en todas las operaciones, lo que está afectando a su capacidad para responder a las necesidades de la población. Estas limitaciones están relacionadas no sólo con el insuficiente nivel de financiación, sino también con un entorno de seguridad cada vez más difícil. Asimismo la pandemia de COVID-19 está contribuyendo a la necesidad de la localización y poniendo a prueba las capacidades de todos los actores en Níger. En este periodo se ha constatado que el personal expatriado de las ONG internacionales, que anteriormente tenía relaciones de poder que no favorecían la localización, ha desaparecido de la cadena de coordinación humanitaria, dejando el espacio a los agentes locales. Así, la situación creada por la COVID-19 ha promovido que algunos de estos actores en Níger se replanteen y reformulen su estrategia de intervención, lo cual está suponiendo una oportunidad para evaluar las capacidades y las competencias locales para ejercer el liderazgo humanitario.
En este contexto, el modelo de asociación entre ACPP y la ONG DIKO es un ejemplo exitoso de localización. En 2009, cuando se inició nuestra colaboración, DIKO era una pequeña asociación de voluntarios con una capacidad de gestión muy reducida y con un presupuesto de 30.000 € anuales. Fue entonces cuando necesitábamos reforzar nuestras capacidades, acceder a la financiación y tener visibilidad en los espacios de decisión. Y fue entonces cuando ACPP aceptó asociarse con DIKO, sabiendo que nuestra primera necesidad era el refuerzo de las capacidades de nuestra organización.
A día de hoy, si DIKO se encuentra entre las mayores organizaciones nacionales de Níger, es gracias a esta voluntad de localización de ACPP, que apuesta por el trabajo en los grandes ejes que desarrollan los compromisos asumidos por la comunidad humanitaria mundial: capacidad, financiación, influencia y acceso. Nuestra alianza con ACPP se asienta en principios igualitarios, pero también en la promoción del liderazgo local y de una estrategia de asociación equitativa. Tras 12 años de alianza con ACPP, DIKO cuenta con más de 100 trabajadores, una cobertura geográfica de más del 25% del territorio nacional, 4 delegaciones y una capacidad de movilización de recursos que supera los 5 millones de euros al año.
Por último, nos gustaría hacer un llamamiento a otros actores internacionales para que simplifiquen y mejoren sus sistemas internos de gestión con las entidades socias locales, para que descentralicen el poder y dejen de pensar que trabajar con actores locales conlleva un alto riesgo intrínseco. La comunidad internacional tiene que invertir en el desarrollo de nuestras capacidades y en el aprendizaje a través de la práctica (coaching). Es necesario que reconozcan, como lo hace ACPP, la existencia de un refuerzo mutuo de capacidades. ●