En Positivo 5
Finalizamos en este número la serie de artículos con los que hemos querido repasar el desarrollo de las políticas sociales y en particular, la política pública de cooperación durante los últimos cuatro años. Desde ACPP defendemos que la cooperación es uno de los instrumentos para luchar contra la desigualdad, también en España, y que debe ser una más de las políticas públicas en los diferentes ámbitos de gobierno. En mayo de 2015 publicábamos un boletín especial que recogía los compromisos adquiridos en sus programas electorales por diferentes partidos políticos en diversos territorios. Cuatro años después, iniciamos esta sección que hemos desarrollado a lo largo de estos últimos meses hasta las elecciones municipales y autonómicas que tendrán lugar en este mes de mayo. En ella proponemos un repaso, que no pretende ser exhaustivo pero sí suficiente, del desarrollo de las políticas sociales que se han llevado a cabo. Y hemos querido hacerlo en positivo, seleccionando algunos de los gobiernos municipales y autonómicos que se han distinguido en esta legislatura por marcar una senda en positivo en el ámbito de las políticas sociales. Una senda que en la mayoría de los casos no ha llevado al cumplimiento de los compromisos adquiridos, y exigidos por las asociaciones especializadas en el ámbito de la cooperación al desarrollo, pero que sí han representado cambios respecto al punto del que se partía, en la gran mayoría de los casos muy significativos. Cambios que, como parte del tejido social de nuestras sociedades, debemos seguir impulsando y exigiendo para que continúen avanzando hasta conseguir los objetivos marcados.
La cooperación para el desarrollo en Navarra, un presente en nuestras manos.
El pasado de la cooperación para el desarrollo en Navarra fue mejor y peor, y nuestro presente, que viene del esfuerzo y del activismo de las ONGD navarras, se enmarca en un contexto económico, político y social cuestionable y ciertamente mejorable. A pesar de ello, este presente es para ACPP/BLB Navarra una valiosa oportunidad, pues hemos iniciado un camino en el cual seguiremos luchando porque en él pensamos quedarnos.
En los meses previos a las últimas elecciones municipales y autonómicas de 2015, muchas personas anhelábamos un cambio en el mapa político del estado español y, en muchos casos, vimos con grata sorpresa cómo efectivamente se dibujó en él un mosaico de colores sin precedentes. Los y las navarras vieron cómo muchas de sus instituciones cambiaban tras más de 25 años gobernadas por un mismo partido, lo cual trajo un rayo de luz a gran parte de la sociedad, hastiada por un panorama político que pedía a gritos ser cambiado.
¿De dónde venimos? En el año 2011, el Gobierno de Navarra representado por UPN, realizó unos drásticos recortes en el presupuesto destinado a la Ayuda Oficial al Desarrollo (AOD), pasando de 18,3 millones, el 0,64 % del Presupuesto general del Gobierno de Navarra, a 4 millones, apenas el 0,14%. La caída en picado continuó hasta 2015, cuando los gobiernos del cambio prometieron y… ¿cumplieron? La ansiada recuperación, lenta y bañada en incertidumbre -no podemos negar que desde las ONGD esperábamos un compromiso firme por parte de los partidos políticos que vinieron afirmando que la cuantía destinada a AOD alcanzaría el 0,5% del presupuesto a final de legislatura – parece progresar hasta el 0,29% para el 2019 tras la aprobación de enmiendas y como resultado de una campaña de incidencia llevada a cabo por las ONGD de Navarra. ¿El Gobierno ha hecho lo que ha podido? Creemos que no, dado que en mayo de 2018 un acuerdo por unanimidad dictaba en el Parlamento que ese 0,5% fuera real para el final de legislatura, por lo que los tiempos marcados no han sido respetados. Por tanto, ¿dónde nos encontramos?
El año 2019 viene con 9,4 millones de euros, un 0,26% cifra que duplica la dramática cifra de 2015. El Gobierno de Navarra indica que ha habido un aumento del 6,44% per cápita con respecto al año anterior, siendo la comunidad con mayor aumento en porcentaje del Estado. Si tomamos este dato de referencia ¿cuál es nuestra valoración? Si bien estos datos distan mucho de lo que demandamos, por lo que seguiremos reclamando unas políticas de cooperación justas y acordes a las posibilidades de Navarra, el aumento de fondos ha permitido la recuperación de la convocatoria de programas de cooperación en los dos últimos años, que ha venido a complementar la convocatoria de proyectos que ya venía publicándose. Con esta financiación, 18 ONGD están trabajando en programas localizados en países prioritarios para la institución, como son El Salvador, Congo, Palestina, Guatemala, Perú, Haití, o Nicaragua, dentro de un amplio abanico de sectores de intervención. Los programas se extienden a periodos de tres años, generando así un mayor impacto en la calidad de vida de miles de personas. Ha sido precisamente en 2018 cuando ACPP/BLB ha obtenido el apoyo para un programa en El Salvador dirigido a garantizar el Derecho Humano a la Salud, que abarca desde el nivel local, en el municipio de Zacatecoluca hasta el ámbito nacional a través de procesos de incidencia comunitaria, fortalecimiento de mecanismos de participación ciudadana y mejora del acceso a servicios públicos de salud de calidad, especialmente en lo que se refiere a Salud Sexual y Reproductiva (SSR). Se trata de una oportunidad para estrechar lazos entre las instituciones Navarras y nuestras contrapartes salvadoreñas y estamos convencidas de que se abre una nueva etapa de cooperación entre ambos territorios.
Igualmente, los proyectos subvencionados en la convocatoria de anuales son casi el doble que los concedidos en años de recortes y, actualmente, el Gobierno de Navarra apoya a 33 ONGD para llevarlos a cabo. En nuestro caso, contamos con este apoyo por tercer año consecutivo, con una iniciativa en Níger por la que decidimos apostar en 2016 y que, en el presente, podemos afirmar que ha supuesto un gran reto conseguido para nuestro trabajo en el país. Junto con nuestra contraparte nigerina DIKO, hemos desarrollado una estrategia en la región de Tillaberi, próxima a la capital Niamey, bajo la siguiente premisa “sin igualdad de género no puede haber desarrollo sostenible”. Cada año, con el objetivo común de garantizar la seguridad alimentaria para una población que presenta recursos limitados para obtener alimentos de la tierra y que sufre además los efectos devastadores del cambio climático en esta parte del Sahel, hemos demostrado que el empoderamiento de las mujeres es fundamental para el desarrollo y transformación de las sociedades rurales africanas.
En el ámbito territorial, el Gobierno de Navarra ha ampliado la partida destinada a proyectos de Educación para el Desarrollo y Sensibilización, aumentando significativamente la de proyectos de sensibilización, pasando de subvencionar 3 proyectos en 2015 a 11 proyectos en 2018. En este ámbito, ACPP/BLB Navarra forma parte de la red de Escuelas Solidarias, iniciativa apoyada por el Gobierno de Navarra, dentro de la cual desarrollamos nuestro programa educativo ESR-EPD en centros de Educación infantil, primaria y secundaria de Pamplona y otros municipios de Navarra. Con la implicación del profesorado y alumnado, hemos introducido distintas líneas temáticas en los currículos de las escuelas: mejora de la convivencia, la construcción de paz y resolución de conflictos; la inspiración feminista desde edades tempranas; los derechos de las personas migradas, refugiadas y desplazadas; el respeto por la diversidad funcional, sexual y cultural… con el convencimiento de que la Educación para el Desarrollo es fundamental para cambiar las reglas desde una escuela crítica y comprometida con la transformación social en Navarra.
Por otro lado, el Departamento de Políticas Sociales también ha hecho grandes avances en materia de inclusión social, ayuda a la dependencia, renta básica y acceso a la vivienda. Recientemente se ha creado el Observatorio de la Realidad Social, que visualiza indicadores esenciales para la investigación social y toma de decisiones, facilita información a personas que hacen uso de servicios sociales, empleo, vivienda y exponen estudios relacionados con empleo, dependencia, discapacidad, inclusión social, infancia, familia, inmigración, personas mayores y vivienda.
Así, se trata de un presente esperanzador que, siempre con nuestra lucha por delante y nuestra mano tendida a los gobiernos, nos impulsa para seguir trabajando por el derecho de todas las personas a tener a una vida digna. ●
Valladolid, ciudad que trabaja por la igualdad y por la erradicación de la violencia de género.
Las mujeres de Valladolid, como las de todas las poblaciones del estado español, sufren la lacra de la violencia de género. En 2018, una mujer fue asesinada y se denunciaron hasta 9 violaciones. En Castilla y León, en 2018 se produjeron 26 agresiones más que en 2016, exactamente el doble que ese año. Las organizaciones feministas y el Observatorio de la Violencia de Género valoran que este incremento se justifica, principalmente, al aumento de denuncias presentadas en comisaría, puesto que las víctimas de agresiones sexuales sienten vergüenza y miedo a ser señaladas con el dedo, a las burlas, los comentarios e incluso las risas. Ante esta situación, es importante que administraciones públicas, partidos políticos, judicatura, fuerzas y cuerpos de seguridad, profesionales implicados en el apoyo a las mujeres que sufren violencia de género desde la medicina, la psicología, la asistencia social, empresas y medios de comunicación, se comprometan en la prevención de este tipo de violencia, así como en la protección y el apoyo a las víctimas.
El Ayuntamiento de Valladolid, gobernado por el PSOE en alianza con las plataformas progresistas Valladolid toma la Palabra y Sí se puede Valladolid desde las últimas elecciones, está llevando a cabo un importante esfuerzo en este sentido, y que es percibido por la población. En el último año se ha visto un importante incremento (14,6%) de dotación al II Plan Municipal contra la Violencia de Género, en el cual se coordinan esfuerzos de información, orientación, apoyo y protección a víctimas. Además en los últimos dos años se han puesto en marcha el Centro Municipal de la Igualdad y un premiado «Plan de Inserción laboral para personas en riesgo de exclusión social y víctimas de violencia machista», con los objetivos de visibilizar y promover una imagen no estereotipada en el mercado laboral de las víctimas de violencia machista y prevenir su discriminación en el empleo, así como facilitar su inclusión social e inserción laboral trabajando en la mejora de su empleabilidad.
Entendiendo la problemática como un asunto transversal pero también global, el Ayuntamiento de Valladolid también financia acciones en materia de cooperación al desarrollo en las que se aborda de manera transversal la lucha por la igualdad y la erradicación de la violencia de género. En este sentido, es interesante señalar que en los últimos 4 años la cifra destinada por el consistorio municipal a la Ayuda Oficial al Desarrollo se ha incrementado en más de un 28% respecto a la legislatura anterior a 2015.
ACPP lleva trabajando en Castilla y León desde el año 2002 y desde septiembre de 2017 hemos vuelto a abrir una delegación en Valladolid. En nuestra Estrategia de Intervención Social precisamente uno de los ejes de trabajo es la lucha contra las desigualdades, y concretamente nos planteamos desarrollar diversas acciones en el plano local que combinen la sensibilización y la denuncia sobre las causas que generan desigualdad y exclusión social, también por razones de género.
Precisamente en esta línea, y en colaboración con la Universidad y el Ayuntamiento de Valladolid, presentamos el pasado 2 de abril en el Centro Cívico Bailarín Vicente Escudero el monólogo “No Solo Duelen los Golpes”, de Pamela Palenciano. En esta representación, que ya se ha hecho popular en todo el territorio nacional, la comunicadora y activista feminista jienense traslada su experiencia personal al auditorio que comparte con ella una sesión de dramedia con momentos desgarradores. En esta ocasión, más de 100 personas compartieron una tarde emotiva en la que el público finalizó levantándose de las butacas para aplaudir a Pamela. Los 45 minutos de duración sirvieron para reflexionar sobre las relaciones de pareja y lo que supone reconocer los privilegios de los que disfruta normalmente un maltratador, para así también detectar desequilibrios y llegar a la conclusión de que, efectivamente, si es amor, no duele. ●