Mejorando la sostenibilidad medioambiental en La Larga y Tumaradó (Colombia)
La Fundación Forjando Futuros y Asamblea de Cooperación por la Paz ampliamos nuestra estrategia de trabajo conjunto para la mejora de las condiciones medioambientales y de vida de la población de La Larga y Tumaradó en Colombia, gracias, en esta ocasión, a la financiación del Ayuntamiento de Madrid. A través de su convocatoria de ayudas a la cooperación al desarrollo del año 2022, el consistorio madrileño nos ha concedido financiación para el desarrollo del proyecto “Superando los impactos del COVID-19 y alcanzando los ODS en La Larga y Tumaradó, Colombia: hacia una sociedad medioambientalmente sostenible y prevención del cambio climático, con enfoque de DDHH y género”.
La Larga y Tumaradó, la zona en la que se desarrollará esta intervención, se encuentra en la subregión de Urabá, al norte del país, junto a la frontera con Panamá. Su población, que se reconoce fundamentalmente como afrocolombiana y campesina, ha visto ampliamente afectadas sus condiciones de vida y sus derechos durante el conflicto armado. Destacan, en este sentido, el desplazamiento forzado de sus comunidades y la degradación medioambiental de la zona provocada por los diferentes actores armados, que se ha producido con una importante intensidad pese a que se encuentra ubicada en la Reserva Forestal Protectora Nacional del Río León. Esta degradación se ha manifestado principalmente en la contaminación de fuentes hídricas, la deforestación, la ganadería extensiva y la extinción de fauna local.
A todo lo anterior se une que el retorno de la población tras la restitución de tierras se realizó, en su momento (en el año 2019 aproximadamente), en condiciones precarias, con insuficientes garantías de reparación, lo que fue contribuyendo a un mayor deterioro ambiental. El alto nivel de necesidades no satisfechas de la población hace que el uso de los recursos naturales se realice pensando en términos de subsistencia personal y familiar, sin posibilidad real de tener en cuenta lo ambiental, lo que afecta al equilibrio ecológico y la biodiversidad y, por tanto, a las propias vidas de sus moradores.
En ese escenario, y con el objetivo de mejorar la sostenibilidad ambiental de la zona, nace este proyecto que ya está en marcha y que finalizará a mediados del año 2024. En sus casi dos años de ejecución, se desarrollarán un gran número de actividades que apuntan a la consecución del objetivo marcado.
En primer lugar trabajaremos para mejorar la resiliencia ambiental, con enfoque étnico y de género, de 5.832 personas, entre habitantes de las comunidades de la zona y funcionariado de la Alcaldía de Riosucio de la que dependen administrativamente. Para ello se les formará, dotándolas de recursos educativos, y se les informará sobre el potencial ecológico y ambiental de las zonas de La Larga y Tumaradó. Además, se elaborará un reglamento interno en materia ambiental y de construcción de paz para y con el Consejo Comunitario de la Larga y Tumaradó. Y se llevará a cabo una campaña de información a sus habitantes sobre preservación medioambiental y construcción de paz, con enfoque de derechos humanos y diferencial de género, etario y diversidad funcional.
Por otra parte, para reforzar la protección de los ecosistemas de las 5.832 personas mencionadas, 3.015 hombres y 2.817 mujeres, está prevista la reforestación de 16 hectáreas de La Larga y Tumaradó con un total de 16.000 árboles. Esta iniciativa se llevará a cabo a través de cuatro jornadas comunitarias de recogida de semillas y/o plántulas de especies autóctonas, la puesta en marcha de un vivero comunitario para el previo crecimiento de las mismas y la formación y acompañamiento a la población beneficiaria en temas como técnicas de agroforestación o el control de plagas, lo que le permitirá desarrollar esta actividad con las mayores garantías de éxito y llevar a cabo acciones de reforestación similares en el futuro.
Además de todo lo anterior, y como programa piloto de comunidad sostenible complementario al resto de acciones, se facilitará el acceso a agua potable y saneamiento básico a 60 personas, 29 hombres y 31 mujeres pertenecientes a 18 familias y se les proporcionará formación en prevención de riesgos COVID-19, agua potable, saneamiento básico, resolución pacífica de conflictos, con enfoque de derechos humanos y género, incluyendo en las mismas a la profesora de la escuela de la comunidad, así como a 4 personas de la Alcaldía de Riosucio, y con una adaptación metodológica para las y los más pequeños de la familia.
